Y ahora…. Como seguimos?

“No hay plazo que no cumpla”. Así dice el refrán, y ya estamos a 2 semanas de iniciar nuestro período del Concejo Municipal de Coyhaique, como cada comuna del país. ¿Los resultados? De un variopinto increíble, algunos mantienen, otros tantos cambian, y entre los que cambia está nuestra querida Ciudad de Coyhaique.

Este cambio de Alcalde y de todo el concejo, no puede dejar de tener sentido, debe indicarnos algo. Debemos saber leer estos resultados. ¿Por qué no se logró mantener ninguno de los concejales que estaba en ejercicio?, ¿Qué mejor vitrina para asegurar la reelección que el trabajo desde adentro, desde el municipio, donde tienes el mejor contacto y comunicación con todos los dirigentes, con todos los individuos que demandan servicios en el municipio?

Sin duda, algo ha fallado, o simplemente ha cambiado.

Con los años de trabajo social y político que tengo a mi haber, me atrevo a decir que los electores han cambiado, la sociedad ha cambiado y además, producto de esta pandemia, que nos ha llevado más de un año de vida, todos hemos cambiado.

Me cuesta imaginar nuestro trabajo, me cuesta imaginar como nos entenderemos 7 personas tan diversas, desde nuestras profesiones, tendencias políticas, nuestros sueños, nuestros compromisos con nuestros electores.

¿Cómo lograremos hacer nuestra carta de navegación?, ¿Cómo conciliaremos los planes y anhelos de cada uno y los priorizaremos, suspenderemos o relativizaremos para aceptar una propuesta diferente a la nuestra?

Si me cuesta imaginar esto, y es cierto, ¿Cuánto más grande el desafío en la Asamblea Constituyente?

Nuestro objetivo en común con ellos, es el mejorar la calidad de vida de los habitantes del país, y el caso nuestro, de la comuna, devolver la credibilidad en la política, la confianza en las autoridades, volver a confiar, volver a mirarnos a los ojos. Poder responder con la verdad, sea o no esta verdad, lo que los usuarios esperan. Simplemente decir con honestidad la respuesta, y trabajar juntos para tener un mejor futuro.

Aquí es donde recuerdo mi mejor escuela, en mi rol de Seremi de Transportes y Telecomunicaciones, no todo era festejos, inauguraciones y corte de cinta, mucho del trabajo que me tocó desarrollar fue administrar conflictos, pienso en situaciones de arduo conflicto, tanto en Coyhaique, como en sectores aislados, como Islas Huichas, Melinka, Tortel, O’Higgins, y tantos otros. Conflictos desde una comunidad molesta por la falta de servicio de transporte, o mala señal de telefonía celular, hasta manifestaciones publicas con toma de camino, generando grandes perjuicios al desplazamiento de la población, como lo eran “Paro de trasporte público” o “Paro de camioneros”.

Esa discusión, o mejor llamemos conversación, con aquellos dirigentes, conocidos de tantos años, que con tanta pasión defendían sus intereses, y que veían en las autoridades a enemigos que no permitían lograr los objetivos. Esos trabajos en crisis, que luego de horas, o días de conflicto, nos llevaban a reencontrarnos en el dialogo con tranquilidad, en que podíamos llegar a entendernos, a saber, quien, y que tenía que ceder, y de que forma, se lograban los objetivos. Y que posteriormente con una mesa de trabajo, se iba avanzando y evaluando el trabajo.

Nada de esto se puede hacer solo, se necesitan más partes, es necesario confiar, mirarse de frente,  

Si bien, fueron experiencias extremas, quiero reconocer en cada uno de esos dirigentes, el valor que tenían al asumir la defensa de sus bases, a no claudicar ni ceder un ápice hasta ver terreno fértil, para lograr sus objetivos, y más aún, reconocer su honor cuando nos volvíamos a encontrar en un abrazo y nos expresábamos algunas palabras, y nos disculpábamos, ya que sabíamos ambos, que la vehemencia en cada uno, fue parte de los difíciles momentos que se vivían.

Siempre volvió la comunicación, siempre hubo respeto, siempre nos pudimos volver a ver cara a cara, y comunicarnos. Y muchos de ellos, me ayudaron hoy, a estar electa como Concejal para Coyhaique. Lo reconozco y lo aprecio, cada voto de la gente del transporte, que hasta hoy confían en mis capacidades, que son las que también logré a presión, en medio de estos conflictos.

Tengo mucha ilusión en este desafío, y me comprometo a poner todas mis capacidades, para el logro de los objetivos,

Quiero trabajar con los dirigentes transporte, dirigentes sociales, con dirigentes vecinales, con mis colegas concejales, con el nuevo alcalde, porque solo juntos, podremos hacer un buen trabajo, y mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos y vecinas.