Opinión: Aprobar no significa reformar

Restan muy pocas semanas para el Plebiscito Constitucional, y los chilenos han construido gradualmente una opinión y posición ciudadana frente a este proceso. Lamentablemente, la franja electoral que debía ser una herramienta informativa efectiva para los indecisos solo ha quedado en un espacio caricaturesco de ambas opciones.

Quienes tenemos nuestro voto claro para el 4 de Septiembre apelamos a que ambas opciones logren promover información en las mismas condiciones en la recta final, lo que claramente no se ha logrado con el grosero intervencionismo electoral del Gobierno en innumerables oportunidades desde que asume el Presidente Gabriel Boric, siendo por estos días  el propio SEREMI de Salud del Bío Bío quien abierta y livianamente en un espacio público se refiere a la instrucción del Gobierno frente al proceso plebiscitario en contradicción con lo declarado por la Ministra Vallejos y la anhelada prescindencia del ejecutivo en el tema. Claramente hay un mensaje externo y uno interno que sería bueno el organismo contralor pueda revisar administrativamente.

Luego de leer dos veces la propuesta constitucional comprendo la desconfianza de los chilenos hacia la labor de la Convención con tremenda desaprobación pública desde su instalación en Julio del 2021. Y mantengo mi voto a favor del Rechazo porque es una Constitución que divide a los chilenos, desde la perspectiva territorial y en tipos de personas. Yo no quiero una sociedad segmentada que solo profundiza diferencias y no enriquece nuestra diversidad. Defiendo la opción Rechazo porque:

1. Se divide la justicia según nuestro origen; se divide entre hombres y mujeres; se divide entre etnias y territorios.

2. Es una Constitución redactada por personas poco preparadas y sin experiencias.

3. Es la Constitución más larga del mundo con artículos incoherentes entre sí.

4. Esta nueva Constitución propone la creación de numerosos puestos laborales para los políticos. ¿Quién los financiara? Definitivamente, esta propuesta de Constitución ha sido pensada en la clase política y no en las personas.

5. Esta Constitución debilita a las fuerzas policiales cuando el gran problema de Chile es la inseguridad, la delincuencia y el terrorismo. Sobre lo último, el terrorismo no se condena como violación a los derechos humanos, y tampoco se regula la migración.

6. La Nueva Constitución no garantiza un sistema de seguridades, todo lo contrario, el fondo de esta propuesta indica que no somos dueños de nuestros ahorros.

7. En el ámbito de la vivienda tenemos garantizado el derecho, pero no hay garantías de acceso a la propiedad.

8. En el ámbito de la salud se propone restringir la libertad a elegir el sistema. Todos vamos a tener derecho a salud, pero solo en el sector público, con el colapso que significa para el sistema y la prioridad a los enfermos más vulnerables. Mejor sería voluntad política para acabar con las listas de espera.

9. Se garantiza el derecho a la Educación, pero se restringe el derecho de los padres a educar a sus hijos y a elegir el modelo educativo para ellos.

10. Es una Constitución que construye escenarios inciertos para la inversión, afectando a los emprendedores y obstaculizando la fuerza laboral. Lamentable realidad que se acentúa en zonas que dependen del Estado como Aysén.

11. Esta Constitución genera numerosas trabas al desarrollo de importantes vocaciones productivas para Chile, tales como la Minería y la Pesca. No lo digo yo, lo dicen los trabajadores del rubro..

12. Se nos propone un sistema político con un Congreso Unicameral depositando un excesivo poder a la Cámara de Diputados.

En resumen, esta propuesta de Nueva Constitución lo establece todo, pero no garantiza nada. En Septiembre muchos rechazarán, pero creemos firmemente en impulsar un proceso de transformaciones porque Chile ha cambiado y hay que propiciar los caminos a la unidad nacional. De aprobarse el texto, ya lo ha dicho Convergencia Social: “Si Gana el Apruebo no se puede cambiar la Constitución, menos por un acuerdo entre partidos”. Por otro lado, el Partido Comunista, a través de su líder Tellier, aseguraron el fin de semana que “No habrá Aprobar para Reformar”… creo que queda claro quienes quieren cambiar el Chile de hoy.-

* Las opiniones y aseveraciones expresadas, son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan, necesariamente, el pensamiento de Radio 45Sur.